Elaborado por Alanis Guerrero, Alumna de Servicio Social del PUEAA
El cine nace en Europa a finales del siglo XIX de la mano de los inventos de los hermanos Lumière que permitieron proyectar por primera vez a un gran público una imagen en movimiento. Desde entonces el cine tomó cada vez más importancia y lo llevó a ser nombrado el séptimo arte al ser incluido en el Manifiesto de las siete artes de Riccioto Canudo de 1911, esto debido a que dentro de una película se pueden incluir las seis otras artes, a saber, la arquitectura, escultura, pintura, música, danza y literatura.[1]
Hoy en día el cine ha evolucionado y se ha convertido en una gran industria con un valor de $101 billones de USD en 2019.[2] Si bien las grandes producciones comerciales se han visto polarizadas en ciertas industrias como la Hollywoodense, el cine no es ajeno en otras latitudes como África o Asia. Sin embargo, su evolución y el contexto ha sido diferente. En este artículo hablaremos un poco sobre el origen del cine en África y lo que la hace tan particular.
El cine fue introducido en el continente africano en el siglo XX y sirvió como un instrumento de colonización y evangelización. Poco a poco surgieron instituciones que creaban películas y documentales que eran distribuidas en unidades móviles, un ejemplo es la Bantu Educational Cinema Experiment fundada en la década de los 30’ o el Colonial Film Unit de 1939. Dichas instituciones pueden considerarse precursoras de la industria cinematográfica en África, aunque las producciones que ellas generaban no tenían el mismo enfoque que el cine africano posterior.[3]
De modo que los especialistas en el estudio del cine africano identifican a la década de los 60’ del siglo pasado como la verdadera fecha de su surgimiento. En un ambiente convulso dominado por las luchas y procesos de descolonización del continente, el cine fungió como una de las herramientas más importantes para lograr o ayudar al cambio político-social que se estaba gestando para la construcción de los posteriores Estados, pues a través de las películas se les daba voz a aquellos que se les fue arrebatada durante los siglos de opresión e imperialismo y sirvió también para combatir los mitos que justificaron la conquista.
Para Beatriz Leal el inicio del cine africano se puede insertar en lo que se denomina Tercer Cine el cual tiene origen en América Latina y fue promulgado por los argentinos Fernando Solanas y Octavio Getino en el manifiesto Hacia un tercer cine: Apuntes y experiencias para un cine de liberación en el tercer mundo de 1969.[4] Este manifiesto veía al cine como “un arma de emancipación y herramienta para la revolución social, abiertamente anticolonial y anti mercantil”.[5] Con este argumento se puede justificar por qué el cine africano pareciera ir en contra de los cánones occidentales utilizando técnicas nuevas o experimentales en la producción y distribución, nuevas formas que abrieran la oportunidad de reivindicar la palabra y las experiencias africanas.[6]
Una crítica que se le ha hecho a este cine es que a pesar de querer ir en contra de los estándares occidentales algunos de los directores pioneros africanos fueron educados en el extranjero, principalmente en Rusia y Francia, retomando en sus primeras obras algunos elementos de este tipo de cine. Sin embargo, parece que dicha crítica no contextualiza las circunstancias puesto que los interesados en cine tenían que salir de sus países por las limitaciones técnicas, esto debido a que antes de las respectivas emancipaciones, el cine era limitado y monopolizado por los poderes coloniales en África.[7]
Por otra parte, se dice que el cine africano se consolido por los cineastas provenientes de las zonas francófonas, en especial de Senegal y Burkina Faso, que contribuyeron ampliamente en la creación y promoción del cine con iniciativas como la Federación Panafricana de Cineastas de 1969 y con la inauguración de diversos festivales de cine como lo son Las jornadas cinematográficas de Cartago de 1966 o el Festival Panafricano de Cine y Televisión de Ougadougou de 1969.[8]
Uno de los grandes exponentes pioneros del cine africano es Ousmane Sembene de Senegal, incluso ha sido considerado como “el padre del cine africano”. Sembene nació el 1 de enero de 1923 en Zinguinchor, Senegal. En su juventud participó en la Segunda Guerra Mundial en el ejército francés. Posterior a la guerra durante la década de los 50’escribió dos novelas El estibador negro y Las astillas de Dios, pero sería hasta 1960 que viajaría a Moscú para estudiar cine, publicando su primer largometraje cinco años después con el nombre La negra de…[9]
El cine de Sembene es muestra fiel del carácter crítico, anticolonial y que buscaba la reflexión del espectador sobre los problemas sociopolíticos de la época como el colonialismo, los golpes de Estado, aculturación o independencia. Ousmane Sembene se consolida, así como un referente imperdible cuando se quiere apreciar y acercarse a este tipo de cine que en muchas ocasiones se fija más en el contenido que en la forma.
En resumen, el cine africano surge como una herramienta de emancipación y de reivindicación de los africanos debido a que por medio de las creaciones cinematográficas se podía expandir con mayor facilidad posturas, principalmente cargadas de un discurso crítico y de denuncia ante los antiguos poderes coloniales, entre el pueblo poco alfabetizado. Este cine es entonces caracterizado como crítico y artísticamente independiente, pues al insertarse en la corriente del tercer cine los directores buscan la emancipación social y cultural a través de técnicas que escapan de la estética occidental, por lo que para disfrutar y comprender el cine africano es importante fijarse en el contenido y mensaje a trasmitir de la obra.
Notas
[1] Castillo, B. (2020, 26 septiembre). Por esta razón se le llama al cine el “séptimo arte”. Recuperado 12 de julio de 2021, en línea
[2] Escandon, R. (2020, 13 marzo). The Film Industry Made A Record-Breaking $100 Billion Last Year. Recuperado 12 de julio de 2021, en línea
[3] Quevedo, V. (2011). La voz del cine africano desde sus orígenes al presente. Recuperado el 12 de julio de 2021, en línea
[4] “El Primer cine (con Hollywood como adalid) era clásico en su forma y su motivación principal residía en el entretenimiento y el beneficio comercial; por su parte, el Segundo cine se encontraba más preocupado por aspectos artísticos, oponiendo creatividad y experimentación formal al encorsetamiento de la narración clásica y erigiendo al autor y su estilo personal como figuras principales de la tradición romántica”. Leal, B. (2012)
[5] Leal, B. (2012) Educando a través del cine de África. Recuperado 12 de julio de 2021, en línea
[6] Quevedo, V. (2011) Op.cit.
[7] Leal, B. ibídem
[8] Leal, B. ibídem
[9] Bayon, M (2007) Ousmane Sembene, padre del cine africano. Recuperado el 15 de julio de 2021, en línea
Fuentes
Bayon, M (2007) Ousmane Sembene, padre del cine africano. Recuperado el 15 de julio de 2021, en línea
Castillo, B. (2020, 26 septiembre). Por esta razón se le llama al cine el “séptimo arte”. Recuperado 12 de julio de 2021, En línea
Escandon, R. (2020, 13 marzo). The Film Industry Made A Record-Breaking $100 Billion Last Year. Recuperado 12 de julio de 2021, en línea
Leal, B. (2012) Educando a través del cine de África. Recuperado 12 de julio de 2021, en línea
Quevedo, V. (2011). La voz del cine africano desde sus orígenes al presente. Recuperado el 12 de julio de 2021, en línea