En octubre del año pasado la libra libanesa perdió el 80% de su valor y fueron anunciadas medidas de austeridad, lo cual causó protestas en todo el país. Esto se ve reflejado en el acceso a alimentos, productos y servicios básicos. Ejemplo de ello es el corte, casi total, del subministro eléctrico, escasez de pan y medicamentos, reducción de servicios médicos, aumento de delincuencia, disminución de importaciones, suicidios, entre otros.
La deuda pública del Líbano asciende a 92.000 millones de dólares, es decir, más del 160% del Producto Interno Bruto (PIB).[3] En mayo se solicitó un préstamo de 10.000 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional (FMI). No obstante, las negociaciones quedaron estancadas luego de que el FMI externara que para poder realizar el préstamo era necesaria una auditoría forense de las cuentas del banco central para determinar dónde ha ido el dinero desaparecido, a lo que los políticos se han negado.[4]
Resulta evidente que detrás de la negación de la auditoría y una reforma, los políticos y élites buscan proteger sus intereses para evitar ser expuestos, puesto que son participes del gran entramado de corrupción en el país. El rescate de la economía libanesa se ve obstruido por distintos intereses personales, y el aceptar las condiciones del FMI harían que el sistema del que se benefician se derrumbe.
Un par de días después de la explosión, bajo el eslogan “todo significa todo” las personas no dudaron en salir a manifestarse. Lo ocurrido acrecentó el enojo y desconfianza hacia el gobierno, por lo que el 10 de agosto, el Primer Ministro Hassan Diab se vio obligado a dimitir de su cargo. Los manifestantes han declarado que nada se soluciona con la renuncia de Diab, no hay un cambio si no se denuncia al sectarismo en el país.
Con una economía en crisis el apoyo internacional es indispensable para reparar los daños provocados por la explosión y brindar apoyo a las personas afectadas. Por lo que el pasado 9 de agosto, fue organizada por el gobierno francés una conferencia virtual para recaudar fondos que serán destinados a la salud, seguridad alimentaria, educación y vivienda. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró que los apoyos serían distribuidos con ayuda de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y diferentes organizaciones internacionales, debido a que la sociedad libanesa no confía en el gobierno y teme que el dinero sea utilizado para otros fines.[5]
Para salvar a Líbano, no es suficiente la renuncia del Primer Ministro Hassan Diab, se debe cuestionar a fondo el sistema político libanes que durante décadas ha estado corrompido por la corrupción, sectarismo y una serie de males que han llevado el país a la ruina. Sin duda, no resultará fácil, pero es necesario renovar el sistema e instituciones políticas de Beirut que han estado establecidas por y para los líderes sectarios después de la guerra civil en Líbano.
Notas
[1] S/A, (2020), Macron en Beirut: ¿una “solución francesa” para Líbano? [en línea], Deutsche Welle. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
[2] Bazzi, M., (2020), The corrupt political class that broke Lebanon [en línea], en Foreign Affairs. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
[3] Bazzi, M., Ibídem
[4] Sly, L., (2020), The lights go out on Lebanon’s economy as financial collapse accelerates [en línea], en The Washington Post. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
[5] Azhari, T., (2020), Lebanon aid Summit raises $300m to be given “directly” to people [en línea], en Aljazeera. Documento en línea [Consulta: 16 de agosto de 2020]
Referencias
Azhari, T., (2020), Lebanon aid Summit raises $300m to be given “directly” to people [en línea], en Aljazeera. Documento en línea [Consulta: 16 de agosto de 2020]
Bazzi, M., (2020), The corrupt political class that broke Lebanon [en línea], en Foreign Affairs. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
Sly, L., (2020), The lights go out on Lebanon’s economy as financial collapse accelerates [en línea], en The Washington Post. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
S/A, (2020), “We need new blood”: Lebanese demand change after gov’t quits [en línea], en Aljazeera. Documento en línea [Consultado: 17 de agosto de 2020]
S/A, (2020), Macron en Beirut: ¿una “solución francesa” para Líbano? [en línea], Deutsche Welle. Documento en línea [Consultado: 15 de agosto de 2020]
Fecha de publicación: 21/08/2020