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Crisis de refugiados sirios: el caso de las mujeres sirias en Líbano
14 Feb 2020

Por Gabriela Gallegos, Alumna de Servicio Social del PUEAA

Una de las crisis más importantes en la última década, no sólo para Medio Oriente, sino también a nivel global, es sin duda la guerra que inició en Siria en 2011. Una de las consecuencias que este conflicto ha dejado es la ola de personas que han tenido que abandonar el país, que desde que comenzó la guerra suma 5.5 millones de refugiados que han tenido que buscar acogida en los países vecinos, principalmente Turquía, Jordania, Irak y Líbano. De estos países, el caso de Líbano resalta por la situación de las mujeres sirias víctimas de trata de personas, esclavitud y prostitución forzada, situación que salió a la luz en medios internacionales hace apenas unos cuantos años.

Según datos de la Oficina Regional para los Estados Árabes de ONU Mujeres, se estima que el número de refugiados sirios en Líbano es de aproximadamente un millón de personas, de los cuales más de la mitad son mujeres (los datos son de 2015, último censo autorizado por las autoridades libanesas al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados). A las dificultades que los refugiados encuentran, como la capacidad de cubrir sus necesidades básicas, al caso de las mujeres se suma la desigualdad de género y la discriminación, volviéndolas más vulnerables a sufrir violencia física y sexual, así como explotación tanto en la esfera pública como privada.

Dentro de estos riesgos, una de las formas de explotación a la que se ven expuestas debido al desplazamiento forzado es la trata de personas y, principalmente, al tráfico sexual. Una situación que las vulnera es la propia legislación libanesa, pues el Código Penal establece que la prostitución no autorizada es un crimen y el castigo es la prisión hasta por un año de cárcel. Ante la dificultad estructural que supone identificar a las víctimas del tráfico sexual en el país, así como a los traficantes y otras personas que operen facilitando la red de tráfico, la mayor parte de mujeres son vistas como criminales por ejercer la prostitución en vez de como víctimas. De acuerdo con las Fuerzas de Seguridad Internas, la policía libanesa, 304 mujeres fueron arrestadas bajo cargo de prostitución, de las que más de la mitad eran sirias, y más tarde encarceladas. Ese mismo año, 75 mujeres sirias fueron liberadas de una situación de explotación sexual y esclavización al rescatarlas de dos burdeles en Joünié, en donde fueron maltratadas, torturadas y obligadas a prostituirse durante meses. Debido a esta situación, el Informe sobre Trata de Personas 2019 del Departamento de Estado estadounidense situó a Líbano en TIER 2 (de acuerdo con el nivel de cumplimiento de los estándares para la eliminación de la trata de personas en todas sus formas), porque a pesar de no cumplir completamente con los estándares mínimos para la eliminación de la trata, se están haciendo esfuerzos significativos para tal fin, sobre todo mediante el trabajo conjunto con ONGs, las cuales buscan proporcionar servicios de protección a las víctimas. Sin embargo, como afirma George Ghali, director de Alef (un organismo que vela por los derechos humanos en Líbano), contrarrestar el tráfico de personas e identificar a las posibles víctimas no puede hacerse sólo por ONGs, pues al tratarse de crimen organizado es un asunto que compete al Estado en sí mismo


Referencias

Dore-Weeks, R. (2018). Unpacking gender realities in displacement: the status of Syrian refugee women in Lebanon. ONU Mujeres. Documento en línea

Esta es la situación de la guerra en Siria a enero de 2020. (2020). ACNUR Comité español. Documento en línea

Sala, D. (11 de febrero 2020). The Syrian women and girls sold into sexual slavery in Lebanon. Beirut: Al Jazeera. Documento en línea

Trafficking in Persons Report 2019. (junio 2019). Departamento de Estado de EE.UU. Documento en línea


Fecha de publicación: 14/02/2020