El franco CFA en África Occidental como moneda neocolonial

Cuando se habla de integración económica la primera cosa que probablemente se viene a la mente es la Unión Europea, sin embargo, alrededor del mundo existen varios proyectos. En el caso de África se dice que hay 11 proyectos de integración alrededor del continente (de Melo & Tsikata, 2015) en los cuales se destacan zonas monetarias, tratados de libre comercio, acuerdos de cooperación, entre otros. Tal es el caso del Franco CFA, moneda dividida en dos zonas monetarias, una en África Occidental y otra en la región central, lo cual se abordará en la presente nota con mayor énfasis en la primera, haciendo un breve recorrido de su origen hasta el actual proyecto con la moneda “eco”.

Esta zona monetaria surgió en 1945 al término de la Segunda Guerra Mundial, cuando Francia queda en ruinas al mismo tiempo que empezaban a surgir movimientos de descolonización. Pese a lo anterior, era claro que las colonias tenían un papel importante en el proceso de recuperación para este país en la posguerra, por ende, factores como la alta inflación, los múltiples préstamos y la necesidad de reconstrucción fueron determinantes para que los franceses tomaran la decisión de crear una comunidad francesa en sus colonias africanas, es decir, en vez de darles su total independencia, les permitiría mayor libertad a gobiernos locales mientras siguieran dentro de la comunidad propuesta.

Aún cuando el plan fracasa en 1958 y Francia les otorgara su independencia en años siguientes, la zona CFA seguiría presente con esta divisa, creando así una zona económica que seguiría bajo jurisprudencia por parte del país europeo, obteniendo beneficios para controlar el comercio y los recursos naturales de la región.

No obstante, no pasó mucho tiempo para que se dieran los movimientos independentistas en África, con lo cual surgirían nuevas naciones. A pesar de esto, la influencia de Francia permaneció, pues debía haber un representante de este país en los órganos de los Bancos Centrales y se le tenía que depositar la mitad de las reservas en una cuenta de operaciones a la Tesorería francesa. A cambio, esta institución se comprometía a dar reservas al Banco Central de la región en caso de que se terminaran.

El originalmente llamado Franco de las Colonias Francesas en África (CFA) se dividiría en dos y cambiaría su denominación en el período posindependentista debido a la africanización del concepto y por una cuestión geográfica entre África Occidental y Central, adoptando así los nombres “Comunidad Financiera Africana” y “Cooperación Financiera en África Central”, respectivamente, sin embargo, las divisas en ambas regiones no valen lo mismo. Asimismo, los países que conforman el bloque Occidental son Benín, Burkina Faso, Costa de Marfil, Mali, Níger, Senegal, Togo y Guinea-Bissau, esta última no fue colonia francesa pero se incorporaría en 1997 (Samba, 2020).

Para los países en África donde se insertó significó una dependencia financiera con el país europeo, pues la moneda estaría a un tipo de cambio fijo y el 50% de sus reservas estarían resguardadas en el Tesoro francés, a cambio de una devolución de intereses sobre estas y una garantía en convertibilidad a euros. Por otro lado, también existe una pérdida de independencia en cuanto a política monetaria, pues lo que se establece en Francia, es seguido en los demás países que manejan el franco CFA, con lo cual se ignoran las diferentes necesidades de cada país de acuerdo a las problemáticas que afrontan, pues las medidas monetarias establecidas no corresponden a ellas. Tal fue el caso de 1994, cuando Francia decidió devaluar la moneda, afectando a estos los países africanos.

Con lo anterior, hay quienes están a favor y otros en contra del establecimiento de esta divisa en países africanos. Los defensores argumentan que al ser una moneda proveniente de Francia, se les otorga cierta protección y seguridad monetaria al resto de los países que la usan, ayudándoles a desarrollar sus economías. Sin embargo, existen también quienes se posicionan en contra, incluso desde el inicio del establecimiento del franco CFA, pues argumentan que es una herramienta de control neocolonial sobre estas economías.

En julio de 2019, la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDAO, por sus siglas en inglés) y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunciaron que el fin de esta moneda cambiándola por la llamada “eco”. Cabe resaltar que, además de los países que manejan el franco CFA mencionados anteriormente, también son integrantes de esta comunidad Gambia, Ghana, Guinea, Liberia, Mauritania, Nigeria y Sierra Leona, con lo que estos Estados también harían uso de la nueva divisa. No obstante, la búsqueda hacia una nueva divisa había sido uno de los objetivos en la CEDAO desde su fundación en 1975, sin embargo, esto se había ido retrasando.

De acuerdo con Wilson (2021), entre los cambios hacia esta nueva divisa, además del nombre, está la eliminación de los requisitos necesarios para que las reservas se queden en el Tesoro francés y que esté presente un representante de Francia en la junta del Banco Central de los Estados de África Occidental (BCEAO, por sus siglas en francés), es decir, del banco central de la región. Además, aunque inicialmente se anunció que la moneda entraría en función al año siguiente, eso no ocurrió y actualmente se encuentra pospuesta, con lo que hay poca claridad respecto a su futuro inicio y manejo.

Aún cuando la moneda “eco” se refiere a abandonar el franco CFA, este no es un cambio radical, pues la garantía por parte de Francia seguiría presente. Asimismo, la estabilidad monetaria seguirá anclada al país europeo y el valor de la moneda eco estaría respaldado por la credibilidad de la francesa. Es por ello que países como Nigeria, económicamente superior a muchos países de la región, aún cuando sí buscan una unión monetaria con los Estados vecinos, no están de acuerdo con este proyecto, pues sigue estando bajo la sombra de Francia.

Referencias

De Melo, J. y Tsikata, Y. (2015). Regional integration in Africa: Challenges and prospects. CEPR Discussion Papers. No. DP10598.

Samba, N. (2020). Moving forward to African Monetary Integration. Vol. 45, No. 2, pp. 39-58.

Wilson, J. (2021) Losing currency? The shifting landscape of the CFA franc zones. Third World Quarterly. Vol. 42, No. 4, pp. 736-754.