El ex primer ministro singapurense Lee Kuan Yew nos ofrece un gran panorama de la región del sureste de Asia. El entendimiento de la situación del medio en el que se encontraba le permitió aprovechar la realidad en beneficio de Singapur. Sin haber comprendido en qué situación estaban sus vecinos, Singapur no hubiera podido ser una potencia regional.
Lee nos ofrece en su libro From Third World to First un análisis de la relación con los demás países de la región. Empezando con Tailandia, Lee asegura que la situación de ese país era buena en general. Tenían a personas capaces al mando, preparadas. Sin embargo, la geopolítica manejada por los tailandeses era terrible, acorde al primer ministro. La visión geopolítica de Singapur y de Tailandia eran distantes, por lo que Lee llegó a hacer recomendaciones que encaminaran a ambos países hacia un rumbo común.
El caso de Filipinas es un mundo completamente aparte, argumenta Lee. El estilo de hacer política en Manila, el gobierno bajo el cobijo estadounidense y la cultura del archipiélago hacían que el entendimiento entre ambos países fuera un poco más difícil. La enorme desigualdad en Filipinas era un problema a atacar porque Lee Kuan Yew buscaba estabilidad en la región y la desigualdad hace vulnerable a un país. Sin embargo, reconoce el gran potencial que tiene Filipinas y la posibilidad de que sea sumamente exitoso dentro de ASEAN.