Industria Africana: Desarrollo y Perspectivas. Conferencia Magistral del Primer Coloquio Internacional de Estudios Africanos

La Universidad Nacional Autónoma de México organizó a través del Programa Universitario de Estudios sobre Asia y África el Primer Coloquio Internacional de Estudios Africanos en la Ciudad de México, coordinado por la Dra. Alicia Girón, el Dr. José Luis Gázquez y el Mtro. Javier Sacristán. El Primer Coloquio Internacional de Estudios Africanos es precedente histórico en la academia mexicana con relación a los estudios que giran en torno al continente africano desde una perspectiva sur-sur.

Entre las conferencias que se impartieron los días 17 y 18 de septiembre en Ciudad Universitaria, se abordaron temas como la Historia Mundial desde una perspectiva africana, Construcciones Políticas de África Contemporánea, Género, Seguridad y Desarrollo, Cooperación Internacional y Cambio Climático, Economía, Arte, Música, Literatura y otros temas más. De estas, destacó la Conferencia Magistral del Dr. Carlos Oya, sobre las perspectivas actuales de la industrialización en el continente africano.

Para introducir al Dr. Oya, este es profesor investigador de la Universidad de Londres en la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (SOAS por sus siglas en inglés), en donde ha desarrollado investigaciones y trabajo de campo en la región de África Subsahariana. Sus investigaciones giran en torno a la economía política agraria, economía política del desarrollo, entre otros temas. Su conferencia inició con una pregunta, ¿Puede África aspirar a industrializarse en el siglo XXI?, como indicó, la respuesta es normalmente negativa. Explicó que tanto analistas como economistas no ven en los países del continente africano las condiciones necesarias para que estos desarrollen un plan de industrialización a mediano, y mucho menos, a largo plazo; condenando a estos países a verse así mismo como eternos exportadores de bienes primarios.

Sin embargo, la primera crítica es, que en primera instancia no todos los países africanos cuentan con el mismo nivel de industrialización. Los antecedentes coloniales de cada país, sumado a los planes de desarrollo industrial de la administraciones de los estados africanos independientes, son las principales razones del porqué ciertos países africanos cuentan con un mayor o menor desarrollo industrial que otros. Un ejemplo es que el 30% de la industria del continente se concentra en Sudáfrica, mientras casi el 25% en Nigeria. Un total de 55% del desarrollo industrial del continente está condensado solamente en dos países; Nigeria que es el país más grande y Sudáfrica el más desarrollado. No obstante, remarcó que los porcentajes de empleo industrial en países africanos como Lesoto, Mauricio y Sudáfrica son tan altos como en China.

Entre otros factores explicó que el bajo desarrollo industrial es consecuencia a la baja inversión del PIB a la industria, los conflictos armados, y la corrupción en gobiernos no democráticos, además de la poca planeación de estos países para el buen y correcto desarrollo de la industria. Sumado a esto, los ajustes económicos estructurales promovidos por parte de organizaciones bancarias internacionales llevaron a los países africanos a un proceso de desindustrialización a partir de la década de 1980. Este último factor, es esencial para explicar el porqué de las políticas económicas de los países africanos se encuentra tan subdesarrollados actualmente, cuando en los primeros 10 años de sus independencia contaban con niveles de industrialización más altos que los actuales.

Sin embargo, a pesar de la perspectiva económica negativa que existe en África, existen países que son ejemplo de éxito del desarrollo industrial como lo es la Isla Mauricio. Para 1960, comentó el Dr. Oya que, algún economista dijo que no había fe en la isla para desarrollarse, debido a que por sus condicionas estaba destinada a permanecer como una economía basada en las plantaciones de azúcar, sin embargo, la isla Mauricio se las arregló para lograr un desarrollo económico de estadios en donde se desarrolló la industria, entre ellas la textil, que dio trabajo a los ciudadanos, especialmente a las mujeres. De esta forma, a pesar de las predicciones negativas Mauricio se reinventó a sí mismo como un país desarrollado industrialmente.

La industria africana es tan competitiva como la china, pero los principales obstáculos que impiden su crecimiento son la falta de infraestructura, un marco legal que promueva y de seguridad a la inversión, y el déficit de la competencia de la mano de obra, tanto en escolarización y aprendizaje práctico y técnico. En los países africanos hay potencial no solo para la producción y exportación de productos primarios sino también manufacturados y de servicios.

Otro ejemplo de renacimiento industrial es Etiopía. Etiopía tiene uno de los índices más grandes de inversión en el continente, muy similar al índice de inversión de China. Además de acompañar la inyección de capital con una política de inversión coherente y ambiciosa. Si algo tienen en común los países que se han industrializado en África, establece el Dr. Oya, es el deseo de industrializarse.

Así a pesar de sus limitaciones los países africanos si son capaces de desarrollarse industrialmente, a pesar de haber comenzado este proceso tardíamente. Esta meta se puede alcanzar, superando sus obstáculos, primero, superar los obstáculos de índole política, obtener acceso a inversiones de largo plazo, mejorar y construir las cadenas de valor global y facilitar la creación de conglomerados y parques industriales. Siguiendo estás recomendaciones, es posible que más países africanos sean como ejemplos exitosos del desarrollo industrial.


Fecha de publicación: 18/10/2019